China ha optimizado la instalación de la Instalación de Radiación Síncrona de Shanghái (SSRF), una infraestructura fundamental para la investigación en ciencia y tecnología en el este del país. Esta mejora, que se completó en julio de 2023, ha sido crucial para potenciar su luminosidad, lo que se traduce en avances significativos en áreas como la medicina y la ciencia de materiales.

La última actualización del SSRF ha sido aprobada tras una inspección nacional, lo que subraya su importancia en la exploración de los misterios del mundo microscópico. Este proyecto, que comenzó en noviembre de 2016, ha incluido la construcción de 16 líneas de haz y estaciones experimentales de vanguardia, laboratorios auxiliares y centros de datos para usuarios.

Tai Renzhong, vicepresidente del Instituto de Investigación Avanzada de Shanghái de la Academia China de Ciencias, explicó que las mejoras también abarcan un notable aumento en el rendimiento del acelerador, lo que se espera impulse aún más la investigación científica.

El SSRF fue inaugurado el 6 de mayo de 2009 y es reconocido como la primera fuente de luz de sincrotrón de tercera generación en el continente chino. Su diseño, que se asemeja a un nautilus visto desde arriba, refleja tanto su complejidad como su importancia para la comunidad científica.

La luz emitida por la instalación es mil millones de veces más intensa que los rayos X convencionales. Esto permite a los investigadores iluminar diversas muestras en las estaciones experimentales mientras que utilizan instrumentos científicos para registrar detalladamente las interacciones luz-materia.

Tal capacidad proporciona a los científicos información valiosa sobre el mundo microscópico, incluyendo la estructura de los virus y las propiedades de los materiales en niveles que antes eran inalcanzables. Esta mejora en la tecnología de la información ayudará a expandir los límites del conocimiento en múltiples disciplinas.

(Con información de Xinhua)