En el mes de septiembre se celebra el Mes Mundial del Alzheimer, una campaña de alcance internacional que busca concienciar y aumentar la comprensión sobre esta enfermedad y otras formas de demencia.

La enfermedad de Alzheimer es un trastorno que afecta el cerebro, alterando la memoria y las capacidades cognitivas. Con el creciente uso de herramientas de inteligencia artificial en la vida cotidiana, surge la inquietud sobre si la dependencia excesiva de estas tecnologías puede impactar negativamente la salud cognitiva, potencialmente aumentando el riesgo de desarrollar Alzheimer u otras demencias debido a una disminución en el compromiso cognitivo.

Guo Yi, profesor e investigador principal en el Laboratorio de Shenzhen Bay y experto en el Programa de Salud Cerebral del Hospital United Family, señala que el uso de herramientas de inteligencia artificial puede inducir a las personas a reflexionar sobre las respuestas que reciben y a buscar maneras de superarse a sí mismas. Sin embargo, enfatiza que no existe un vínculo directo entre el uso de la inteligencia artificial y el inicio de demencias.

Este enfoque podría proporcionar un alivio a quienes están preocupados por el uso excesivo de la IA y su posible relación con enfermedades neurológicas. Es fundamental mantener un equilibrio entre el uso de tecnología y la estimulación cognitiva para preservar la salud cerebral.

A medida que la inteligencia artificial sigue integrándose en nuestras actividades diarias, la importancia de comprender sus efectos sobre la salud se vuelve cada vez más relevante. La conversación sobre el uso de la IA y su relación con la cognición continuará evolucionando, a medida que más estudios se realicen en este ámbito.

En resumen, aunque es esencial ser conscientes de cómo la inteligencia artificial afecta nuestras vidas, hasta el momento no hay evidencia que apoye que su uso cause demencia. Es crucial seguir investigando estas interacciones para poder ofrecer recomendaciones basadas en evidencia para su uso.