China ha logrado un hito significativo en el ámbito aeroespacial con el exitoso lanzamiento del cohete Zhuque-2 Y-2, el primero en el mundo propulsado por metano en alcanzar la órbita. Este avance representa un desarrollo clave en la tecnología de propulsión para cohetes.

Los motores a base de metano son reconocidos por su alto rendimiento y bajos costos operativos, lo que los hace especialmente adecuados para cohetes reutilizables. Sin embargo, maximizar su potencia ha sido un desafío.

Desde diciembre del año pasado, varios cohetes, incluidos el Zhuque-2 Y-1, el Terran 1 de Relativity Space y el Starship de SpaceX, han enfrentado fracasos en sus lanzamientos iniciales, lo que enfatiza la importancia del reciente éxito de China.

El lanzamiento del Zhuque-2 Y-2 representa otro triunfo para el sector aeroespacial privado de China en 2023, siguiendo el exitoso lanzamiento en abril del cohete Tianlong-2 de Space Pioneer.

Conocido como ZQ-2 Y2, el cohete fue lanzado desde el Centro de Lanzamiento de Satélites de Jiuquan a las 9:00 a.m. (BJT) del miércoles, en el desierto de Gobi en el noroeste de China.

Esta exitosa misión no solo ha verificado los distintos esquemas del cohete, sino que también ha establecido una base sólida para el desarrollo de cohetes reutilizables en etapas futuras, según LandSpace, el desarrollador privado del cohete.

El Zhuque-2 utiliza metano líquido como combustible y oxígeno líquido como oxidante. Estos motores son reutilizables, no tóxicos y potentes, lo que los convierte en elementos clave para el futuro de los cohetes reciclables.

Con una configuración de dos etapas, el cohete tiene un diámetro de 3.35 metros, una altura de 49.5 metros, un peso de lanzamiento de 219 toneladas y un empuje de despegue de 268 toneladas.

Esta misión fue el segundo vuelo de prueba del Zhuque-2 tras un intento fallido en diciembre pasado, y se realizaron varias mejoras en el cohete a través de simulaciones y pruebas en tierra.

Tras este éxito, LandSpace se enfocará en optimizar aún más el cohete, acumulando experiencia en confiabilidad y seguridad, y sentando las bases para comercializar productos que ofrezcan un alto rendimiento a un bajo costo.

Desde 2015, China ha fomentado activamente el desarrollo de vuelos espaciales comerciales por parte de empresas privadas, lo que ha llevado a un crecimiento rápido en este sector, con una tasa de aumento del 20 por ciento anual.

El uso de metano como combustible se considera una dirección clave para el futuro de la tecnología espacial, con diversas potencias aeroespaciales mundiales, incluida SpaceX y Blue Origin, compitiendo en este ámbito. Zhang Changwu, fundador de LandSpace, destacó que esta combinación de combustibles tiene ventajas en costos y rendimiento en cohetes reutilizables.