Científicos chinos han hecho un importante descubrimiento sobre cómo el cáncer de mama manipula los nutrientes para evadir el sistema inmunológico. Este estudio destaca la relación metabólica entre las células cancerosas y las células inmunitarias, lo que ayuda a explicar el comportamiento agresivo del tumor y su resistencia a los tratamientos de inmunoterapia.

Liderado por el profesor Hu Hai del Instituto de Medicina de Hangzhou y el Hospital del Cáncer de Zhejiang, en colaboración con la profesora Luo Man-Li y el profesor Li Hongde, el estudio fue publicado en la revista Cancer Cell el 3 de abril.

Los investigadores encontraron que las células de cáncer de mama actúan como 'fábricas de arginina', saturando el microambiente tumoral con este aminoácido. Aunque la arginina es crucial para una función inmunológica adecuada, las células tumorales la utilizan para manipular a los macrófagos asociados al tumor, que son un tipo de célula del sistema inmunológico.

Una vez reprogramados por la arginina, estos macrófagos suprimen las células CD8+ T, que son esenciales en la lucha contra el cáncer. Esta reprogramación impulsa la progresión del tumor y dificulta la respuesta inmunitaria.

Utilizando análisis metabólicos avanzados y técnicas de células individuales, el equipo estudió cómo la arginina derivada del tumor altera el microambiente tumoral. Los macrófagos asociados al tumor absorben esta arginina y la convierten en poliaminas, moléculas que modifican la programación genética de los macrófagos, colocándolos en un estado que favorece al tumor.

Estos hallazgos sugieren nuevas estrategias de tratamiento. Al interferir con el metabolismo de la arginina, los investigadores lograron restaurar la actividad de las células T CD8+ y ralentizar el crecimiento tumoral en modelos preclínicos.

Con base en estos descubrimientos, el equipo propone combinar medicamentos que apunten a la arginina o a las poliaminas con las inmunoterapias actuales para romper el ciclo de supresión inmunitaria.

Aunque esta investigación se centra en el cáncer de mama, los científicos creen que este mecanismo metabólico puede aplicarse también a otros tipos de tumores. Esta investigación representa un avance crucial en el desarrollo de terapias de precisión que podrían proporcionar un tratamiento dual, estrangulando el suministro de nutrientes a los tumores y reforzando al mismo tiempo el sistema inmunológico.