Beijing ha anunciado la creación de una zona de demostración de conducción autónoma que abarcará 3,000 kilómetros cuadrados, un proyecto ambicioso que tiene como objetivo promover pruebas y avances en el transporte inteligente en la ciudad. Esta iniciativa se ha dado a conocer durante la Conferencia Mundial de Vehículos Conectados Inteligentes que se llevó a cabo recientemente.

La nueva zona se ubicará entre el cuarto y el sexto anillo de la ciudad, lo que representa casi una quinta parte de la superficie total de Beijing. Esta área ha estado en desarrollo desde 2020, cuando se estableció la primera zona de prueba de conducción autónoma del país, que inicialmente abarcaba 600 kilómetros cuadrados.

Instalaciones inteligentes han sido implementadas en las carreteras dentro de esta zona de demostración de alto nivel, lo que ha facilitado que empresas líderes en tecnología y transporte, como Baidu, Pony.ai, WeRide, Neolix y JD.com, participen en este esfuerzo. Las empresas están colaborando en ocho escenarios de aplicación, que incluyen vehículos de pasajeros conectados, entrega no tripulada, patrullas autónomas y logística de carga.

Hasta el momento, la zona ha otorgado licencias de prueba de carretera a 33 empresas, permitiendo la operación de casi 900 vehículos que han registrado más de 32 millones de kilómetros en pruebas de conducción autónoma. Esta cifra representa más de una cuarta parte del total de pruebas realizadas en todo el país.

Además, se han iniciado pruebas de autobuses autónomos en lugares estratégicos como el Aeropuerto Internacional de Beijing Daxing y las estaciones de tren de Pékin. La Autopista Pekín-Tianjin-Tanggu también ha sido actualizada para soportar plenamente las operaciones autónomas en logística.

Beijing también está desarrollando propuestas legislativas para regular el uso de vehículos autónomos en la ciudad, lo que permitirá un marco más claro para el crecimiento y desarrollo de esta tecnología innovadora.