Los astronautas de la misión Shenzhou-18 de China, Ye Guangfu, Li Cong y Li Guangsu, regresaron a la Tierra el lunes después de completar 192 días en la Estación Espacial China. Su misión, centrada en la investigación en microgravedad, ha sido un hito significativo para el programa espacial chino.

La cápsula de retorno aterrizó en el sitio de Dongfeng, en la región autónoma de Mongolia Interior, a la 1:24 a.m. Todos los miembros de la tripulación salieron de la cápsula para las 2:15 a.m. y se informó que estaban en buen estado de salud tras el aterrizaje.

La misión Shenzhou-18 ha sido declarada un completo éxito por la Agencia Espacial Tripulada de China, lo que refuerza los logros del país en la exploración espacial. Ye, el comandante de la misión, anteriormente participó en Shenzhou-13, convirtiéndose así en el primer taikonauta con más de un año acumulado en vuelo espacial.

Ye expresó su asombro por el rápido desarrollo del programa espacial de su país y anticipó que pronto se podría establecer un nuevo récord para el tiempo total en órbita por astronautas chinos. Su optimismo refleja las ambiciones de China en el campo espacial.

La misión fue la primera para Li Cong, quien destacó la cohesión del equipo durante su tiempo en el espacio. La tripulación trabajó en estrecha colaboración con el equipo en tierra, logrando con éxito dos actividades extravehiculares y llevando a cabo experimentos científicos en condiciones de microgravedad.

Li Guangsu, también un recién llegado al espacio, compartió su experiencia donde disfrutó de la ingravidez y el esplendor del entorno. Al regresar a la Tierra, expresó su orgullo por su patria, reflejando el sentido de logro y patriotismo entre los taikonautas.

Durante su misión de 192 días, la tripulación realizó múltiples tareas, incluyendo el establecimiento de un nuevo récord en caminatas espaciales, con aproximadamente 8.5 horas en su primera salida. Además, instalaron dispositivos para proteger la estación espacial de desechos espaciales y llevaron a cabo diversas actividades de mantenimiento.

Los astronautas llevaron a cabo experimentos científicos que incluyeron la investigación sobre el comportamiento de los peces en microgravedad, marcando la primera investigación ecológica acuática de China en el espacio. Estos experimentos proporcionaron información valiosa sobre el ciclo de materiales en sistemas ecológicos cerrados.

Asimismo, se realizaron experimentos de cultivo de plantas que analizaron el comportamiento celular en un entorno de microgravedad, contribuyendo al desarrollo de cultivos que podrían prosperar en el espacio exterior. Estos avances subrayan la creciente capacidad de China para la investigación espacial.

La misión Shenzhou-18 no solo representa un avance en la investigación científica, sino también un paso crucial en los ambiciosos planes de China para su programa espacial. Con logros significativos en su haber, el país continúa fortaleciendo su posición en el ámbito de la exploración espacial.